Zoes Cholo!

Y entonces qué, diriamos que fue más de lo mismo, que "se jugó como nunca y se empato como siempre" (?); que si hubieran estado Pizarro y Farfán hubieramos ganado (?)... "que Chemo se equivocó, que debió convocarlos".

No, no se dirá más que Pizarro y Farfán hacen la diferencia, que su nivel de futbol internacional-europeo les da un plus que ningún jugador del medio podría aportar a la selección. Lo único cierto es que si se convoca a esos jugadores (como anteriormente lo hizo Chemo) deben jugar de titulares si o sí. La otra opción sería no convocarlos, pero ningún entrenador hubiera tenido los huevos de hacerlo sin un motivo fuerte. Bueno pues, esos jugadores le dieron el motivo perfecto a Chemo para no convocarlos, por que fue la gota que derramo el vaso, por que sin hacer escándalo por lo ocurrido en el Golf, esos jugadores simplemente estaban demostrando se poco compromiso con la selección y con el proceso de Chemo del Solar.

Chemo tuvo seguramente que pensarlo bien, pero sabía que se le presentaba una oportunidad única para no convocarlos sin recibir las criticas de la prensa por no hacerlo.

Tal vez Piero Alva y Johan Fano jamás lleguen a jugar en Europa, gracias a Dios el futbol es un juego de equipo, y por más talento que un jugador tenga sino cumple su tarea en función del equipo simplemente pasaran desapercibidos. Ayer Alva y Fano no pasaron desapercibidos.

Por que ayer Perú fue un equipo, cada jugador cumpliendo con la función que el técnico planificó con anterioridad, cada jugador siendo él mismo y desbordando su propio talento en la medida en que no se escapara del ensí del equipo. Chemo no solo se la está jugando con los jovenes sino con los jugadores que respetan su autoridad de técnico y hacen lo posible por cumplir lo planificado.

Y Zambrano es un punto y aparte, y con Zambrano tenemos un defensa para los próximos 8 años, por que su espíritu es joven, no tiene miedo, sí fuerza y talento; por que ha crecido y se crece en responsabilidad para con el equipo.

Ayer no solo vi la mano de Del Solar en la cancha, vi su corazón luchador latir en cada centímetro de cesped que temblaba con las pisadas de cada jugador peruano marchando hacia su objetivo.